Este es un test de a que bando del mundo de Ankhuft pertenecerías. (La pronunciación en castellano sería: Ancaf). Ankhuft es el mundo en el que se desarrolla una novela aún no publicada, y esta es su primera aparición en público, así que acepto cualquier propuesta o comentario constructivo.
El intelecto. No hace falta romper una puerta si posees la llave.
La constancia. Incluso los acantilados caen frente el azote del mar.
2. ¿Prefieres estar rodeado de personas en un gran comercio o estar solo en una estepa? (Sin peligrar tu vida en ningún caso).
La soledad. Es mi fortaleza y mi cárcel.
La compañía. Solo se puede aprender de quien no sabes nada.
3. ¿En qué zona te gustaría para vivir?
Cerca del mar, con el sonido de las olas y los mercados.
Aislado, con las tormentas a mis espaldas y el sonido del viento en mi tejado.
En las montañas y sus laderas, con el frío, pero el frío nos hace fuertes.
Como un pueblo nómada y jinete, entre las llanuras y los vientos.
En unas ruinas antiguas, aprendiendo del pasado.
En el pie de las montañas, con los arboles y las rocas.
4. ¿Te importaría vivir en una población religiosa?
Si, no quiero estar rodeado de creyentes con objetivos que creen superiores.
No, me gusta que exista una creencia que guía al pueblo y mantiene las esperanzas.
No me importa ni una cosa ni la otra, prefiero mantenerme al margen el tiempo que pueda.
5. ¿Por cuánto venderías un jarrón que compraste por 10 monedas de oro?
Por 11 monedas de oro.
Por 20 monedas de oro (o lo intentaría).
Lo pondría a la venta por 50 he iría bajandolo de precio hasta dejarlo en 30 (si cuela, cuela)
Prefiero usar el jarrón, para eso lo he comprado.
Habitante de Costa Salmón
En los acantilados del sur del continente, en la coste suroeste, viven los Salmeros. Aunque la mayoría de la población vive en las llanuras de la ladera este, la vida del reino se nutre de los cinco muelles en el acantilado, siendo uno de los países con mayor comercio de Ankhuft.
Aunque sus habitantes no son grandes guerreros, suelen tener el poder de la elocuencia, y eso les hace grandes comerciantes y mercaderes, o al menos lo suficiente para costearse unos buenos mercenarios...
A pesar de que sus tierras son solo grandes estepas de pasto y llanuras que abarcan más allá de la vista, es una tierra digna de ver. Ocupa gran parte del continente, y hace limite en el sur con el Desierto Rojo.
Todo el que habita esta tierra sabe al menos cabalgar, y aún teniendo solo pequeños asentamientos móviles, sus gentes son los mayores soldados de caballería que un ejercito podría necesitar o querer.
Fueron los primeros hombres en salir de la península de Zánazar, y cruzar la que luego sería bautizada como la cordillera del Lobo. Su primer encuentro fueron los lobos, que por su ferocidad acabaron con la mayoría de los expedicionarios, pero con el tiempo aprendieron a convivir.
Ya sea por miedo a descubrir más allá o por sus nuevos compañeros, decidieron habitar esas tierras y asentarse en la ladera oeste de la cordillera del Lobo, dando paso a nuevas generaciones al descubrimiento del continente.
Cuando un grupo religioso encontró las antiguas ruinas de Brioquilie y sus manuscritos enterrados, decidieron que los Isnub eran los mensajeros de su Dios, pero su tiempo en la tierra se había agotado y debían abandonarla a la suerte de los humanos. Los Isnub habían poblado la tierra y dominado a los humanos demasiado tiempo, y no les pertenecía, y al igual que cualquiera que se proclamase por encima de otro humano, debía ser extinguido, dando le la muerte, para lograr la libertad de los pueblos.
Gracias a la silvanita enriquecen para obtener poder.
En la gran meseta del Desierto Rojo, hay un gran castillo solitario, todo el desierto pertenece a este reino. Desde las atalayas es fácil ver venir cualquier cosa, y sus habitantes se jactan de ser el reino inasediable.
Sus gentes son mas ariscas, pero su dominio en la cetrería, y la forma en la que aprovechan el terreno los hace luchadores y arqueros excelentes.
La raza de los gigantes que dio la victoria a Túdaran en la batalla contra Friola. Ahora, asentados en la puerta a las Tierras Inhóspitas que Terión destrozó, esperan que Terión vuelva, encierre a las sombras de nuevo en las Tierras Inhóspitas y repare la puerta que derribó, para que nunca más salgan de ese terrible lugar.
Los gigantes impiden que nadie toque los restos de la puerta hasta que el minotauro que tratan de deidad vuelva para rehacer lo deshecho.
#1asiersan 2 feb 2017, 19:47
Miembro del Fuerte Tempestad
En la gran meseta del Desierto Rojo, hay un gran castillo solitario, todo el desierto pertenece a este reino. Desde las atalayas es fácil ver venir cualquier cosa, y sus habitantes se jactan de ser el reino inasediable. Sus gentes son mas ariscas, pero su dominio en la cetrería, y la forma en la que aprovechan el terreno los hace luchadores y arqueros excelentes.
#25qwi7mb60ft1g9lol810 feb 2017, 23:20
Caballero de las Colinas
A pesar de que sus tierras son solo grandes estepas de pasto y llanuras que abarcan más allá de la vista, es una tierra digna de ver. Ocupa gran parte del continente, y hace limite en el sur con el Desierto Rojo. Todo el que habita esta tierra sabe al menos cabalgar, y aún teniendo solo pequeños asentamientos móviles, sus gentes son los mayores soldados de caballería que un ejercito podría necesitar o querer.
#3nagramhar11 feb 2017, 19:29
Capas Plateadas
Cuando un grupo religioso encontró las antiguas ruinas de Brioquilie y sus manuscritos enterrados, decidieron que los Isnub eran los mensajeros de su Dios, pero su tiempo en la tierra se había agotado y debían abandonarla a la suerte de los humanos. Los Isnub habían poblado la tierra y dominado a los humanos demasiado tiempo, y no les pertenecía, y al igual que cualquiera que se proclamase por encima de otro humano, debía ser extinguido, dando le la muerte, para lograr la libertad de los pueblos. Gracias a la silvanita enriquecen para obtener poder.
#4luisbor716 mar 2017, 02:29
Caballero de las Colinas
A pesar de que sus tierras son solo grandes estepas de pasto y llanuras que abarcan más allá de la vista, es una tierra digna de ver. Ocupa gran parte del continente, y hace limite en el sur con el Desierto Rojo. Todo el que habita esta tierra sabe al menos cabalgar, y aún teniendo solo pequeños asentamientos móviles, sus gentes son los mayores soldados de caballería que un ejercito podría necesitar o querer.
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En la gran meseta del Desierto Rojo, hay un gran castillo solitario, todo el desierto pertenece a este reino. Desde las atalayas es fácil ver venir cualquier cosa, y sus habitantes se jactan de ser el reino inasediable. Sus gentes son mas ariscas, pero su dominio en la cetrería, y la forma en la que aprovechan el terreno los hace luchadores y arqueros excelentes.
A pesar de que sus tierras son solo grandes estepas de pasto y llanuras que abarcan más allá de la vista, es una tierra digna de ver. Ocupa gran parte del continente, y hace limite en el sur con el Desierto Rojo. Todo el que habita esta tierra sabe al menos cabalgar, y aún teniendo solo pequeños asentamientos móviles, sus gentes son los mayores soldados de caballería que un ejercito podría necesitar o querer.
Cuando un grupo religioso encontró las antiguas ruinas de Brioquilie y sus manuscritos enterrados, decidieron que los Isnub eran los mensajeros de su Dios, pero su tiempo en la tierra se había agotado y debían abandonarla a la suerte de los humanos. Los Isnub habían poblado la tierra y dominado a los humanos demasiado tiempo, y no les pertenecía, y al igual que cualquiera que se proclamase por encima de otro humano, debía ser extinguido, dando le la muerte, para lograr la libertad de los pueblos. Gracias a la silvanita enriquecen para obtener poder.
A pesar de que sus tierras son solo grandes estepas de pasto y llanuras que abarcan más allá de la vista, es una tierra digna de ver. Ocupa gran parte del continente, y hace limite en el sur con el Desierto Rojo. Todo el que habita esta tierra sabe al menos cabalgar, y aún teniendo solo pequeños asentamientos móviles, sus gentes son los mayores soldados de caballería que un ejercito podría necesitar o querer.